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Nombre: Udo
Ubicación: La calle en general, Barrio Brasil, Laos

Soy un autentico "GIL BILL"

lunes, julio 12, 2004

TOM EL PAYASO LANZA CUCHILLOS

TOM EL PAYASO LANZA CUCHILLOS

Estaba ahí parado, con los redobles de tambores girando en torno a su cabeza.
El publico silencioso le observaba... expectante,
Un potente foco lo bañaba con su luz... completamente
Su mirada intensa y su blanco y frió rostro, resaltaban de sus coloridas vestimentas
Frente a el, a unos diez metros, se encontraba una niña, de unos ocho años con sus ojos vendados y sus manos y pies atados, que daba Vuelta lentamente en aquella “rueda de la muerte “ que el mismo, TOM había fabricado.
En su mano izquierda quedaba el ultimo cuchillo, el mas grande que de su filo brotaba un brillo intenso que a mas de un espectador logro encandilar.
_ Hoy todo saldrá bien- dijo en voz baja la mujer con barba que junto a la pista se encontraba junto a otros actores de aquel circo.
de pronto el tambor calla...... unos murmullos se dejaron oír desde las gradas,
Y la rueda de madera seguía su curso, desconfiadamente, de ella nació un pequeño ruido, la vieja madera gritaba al viento sus lamentos, la rueda de la muerte lloraba.
Una gota recorrió desde la frente de TOM atravesando su rostro, dejando un surco en su maquillaje,
Llego hasta su barbilla, se detuvo un instante se balanceo hasta luego caer sobre la pista principal
TOM la escucho
Recordó aquellas noches de éxito en el circo de Moscú, cuando apenas siendo un infante ya conocía la fama y la gloria y toda su rutina era un gozo..... ahora a sus 35 años su mano ya no era la misma.



El amanecer cualquiera

Hoy desperté temprano, tímidamente la luz comenzaba a golpear mi ventana,
Me senté en la cama, cosa que no acostumbro, y observe al rededor... me parecía ya visto ya sentido, ya vivido sentí entonces aquello que me mantuvo con ese escalofrió que sube una y otra vez desde tu espalda hasta tu nuca, que es como una serpiente se enrollara en tu espina y comenzara un lento ascenso hasta tu mollera.
Sentí que la muerte me abrazaba con sus cálidos brazos, jugaba con mi pelo y me susurraba al oído. Algo que no alcanzaba a escuchar, pero bien sabia que es lo que era
Hoy seria mi ultimo día, hoy como quien tira el escusado, mi vida se iría así de fácil a dar al mapocho del olvido.......... Pero no me importo.

viernes, julio 09, 2004

El encuentro de dos mundos o el desafío Colliguay

El encuentro de dos mundos o el desafío Colliguay
Este fin de semana cuatro caballeros, salieron en sus corceles de metal desde las grises tierras de Santiago,
En busca de cinco valientes Guerreros que venían desde donde comienza el horizonte.
Esta expedición era llevada por el gran Sir Richard, famoso en todo el mundo por sus grandes hazañas en las tierras grises, en donde había estado en memorables batallas, las que hoy eran recordadas en hermosas canciones.
Junto a el viajaban Quiltrolfo, conocido como el hombre bala, Ricardo cabeza de luz, llamado también Mamabiker y Her Udo o el hombre rana.

Junto salieron hacia donde cae el sol, contando hazañas y cantando canciones que fortificaran sus almas, a no mucho andar el monte negro les cerro su paso, los cuatros caballeros quedaron perplejos, pero Si Richard dijo unas palabras mágicas y el cerro se abrió ante el asombro de los demás caballeros y así pudieron seguir su viaje.
Después de unas cuantas horas llegaron a una aldea donde descansaron y observaron a los demás caballos del lugar que andaban libres y por millares, sin riendas que los atase a algún dueño, esto era casi un sueño y fue mucho más cuando una hermosa doncella pasa al lado de los viajeros, era tan hermosa que al caminar dejaba una estela de luz y de amor.
Pero no todo era bueno para estos caballeros ya que antes ellos llego una malvada bruja, que al verse apocada por la hermosura de la doncella maldijo a la expedición y propino improperios a Ricardo cabeza de luz, por no darles unas monedas de oro.
Los cuatro viajeros rieron de estas maldiciones y continuaron su viaje entre los cerros de estas tierra extraña.
En el trayecto del viaje Sir Richard observo que unas sombras negra seguía los pasos de la expedición, así que decidió quedarse atrás e ir borrando las huellas que los corceles de metal dejaban a su andar, pero esta distracción fue aprovechada por la malvada bruja, la cual adelantándose a los cuatro caballeros, dijo unas palabras mágicas y el camino por el cual debían seguir fue cerrado por grandes matorrales.
Cuando pasaron los tres caballeros, no notaron nada extraño así que siguieron su viaje hacia la montaña de fuego.

Los tres caballeros siguieron subiendo la montaña de fuego, pero a cada paso el calor sé hacia más insoportable, el agua se acababa al igual que las energías, entonces decidieron parar y esperar a su Guía Sir Richard, el cual nunca llego.

Pasaron horas y la desesperanza abordo sus corazones, sabían que estaban en territorio hostil así que temieron por la vida de Sir Richard, fue entonces cuando Her Udo dijo las celebres palabras “ya, yo voy” y bajo la montaña de fuego en busca de Sir Richard.
Mientras descendía buscaba rastros de Sir Richard pero no encontraba ninguno, hasta que llego a la unión de dos camino, que antes no estaban ahí, se dio cuenta que habían sido engañados, que la maldita bruja había separado con sus hechicerías a los viajeros.

Cuando el cuarto viajero paso por ese sector la maldición había desaparecido así que habría tomado el camino correcto, pero estaba solo en tierras peligrosas.


Un regalo

Está listo maestro!... puedes empezar a escribir.